Este mamífero -originario de África- es reconocido por su exótico pelaje, que es erecto a lo largo del cuello. Tiene unas orejas grandes y una cola terminada en un mechón de pelos oscuros. Es más pequeño que su pariente el caballo y muy parecido en aspecto y hábitos al asno salvaje. En algunas zonas de África, las cebras se utilizan en carreras de tiro y son animales muy comunes en zoológicos y circos.
Tipos
Existen tres especies de cebras y varias subespecies, según posición de las rayas del pelaje.
La primera es la cebra de montaña (la más pequeña de las especies), que mide 1,2 m a la altura y tiene un cuerpo bien proporcionado, fuerte y musculoso. El pelo de estos animales es blanco-plateado y las rayas negras están repartidas por todo el cuerpo, menos en el estómago y en la parte interior de los muslos.
Las cebras de montaña viven en las zonas del Sur de África en rebaños pequeños y, como pasa con muchas otras especies salvajes, ha sido blanco de cazadores inescrupulosos.
A las cebras de tamaño medio que habitan las sabanas de África oriental y el Sur de Africa, los ingleses las llaman «de Burchell«. Pero la cebra común es la especie que incluye a todas estas variedades (Equus quagga), de la que se desprenden la cebra de Grant, de Böhm y de Chapmann.
La tercera de estas especies es la cebra de Grevy (o cebra real), que mide 1,5 m a la altura y sus rayas son muy numerosas y estrechas. Antes se les podía encontrar en muchos lugares, pero hoy solo se pueden ver en el este de África, aunque ya está casi extinguida.
Las rayas de la cebra
El curioso diseño de la piel de las cebras se debe según los expertos a su necesidad de disimularse, de notarse lo menos posible entre el follaje de las praderas africanas. En buenas cuentas, lo tienen para escaparse de sus depredadores. Para los grandes carnívoros, tigres, leopardos y leones ellas son un «manjar de los dioses» y las persiguen hasta devorarlas. En los parques de Kenya y Tanzania, en las áridas estepas de Somalía, allá en África Oriental y Sudáfrica se reparten varias razas de cebras, todas como caballitos rayados, moviéndose ágilmente en rebaños a gran velocidad.
Ellas son herbívoras, sólo se alimentan de hierbas y muy gregarias, o sea viven siempre unidas en grupos familiares y por lo general cerca del agua, en las orillas de los ríos.
Estos formidables animales africanos, se las han arreglado a lo largo de los millones de años de evolución para «inventar» sus rayas en blanco y negro. Y no crean que es para llamar la atención, todo lo contrario su capa listada tiene la misión de descomponer la silueta del animal cuando se mueve contra el horizonte. Así logra ocultarse de sus enemigos.
La atmósfera vibrante por efecto del calor en la llanura africana, contribuye a disolver aún más la figura de las listadas cebras que se alejan corriendo del peligro.
El hombre logró éxito al imitar el camuflaje de las cebras, pintando con anchas bandas de colores contrastados los barcos de guerra. Así logró disimularlos en alta mar y no ser vistos por sus enemigos.
Exterminio de las cebras
La maravillosa piel de las cebras significó también su matanza. Los colonizadores del continente africano las mataron por miles para extaerles su piel. Su exterminio fue tan grande que ahora pueden hallarse solo en los grandes parques nacionales de Africa Oriental protegidas por la Ley.
Clasificación
La cebra pertenece a la familia de los Equidos, dentro del orden de los Perisodáctilos. La cebra de montaña recibe el nombre científico de Equus zebra; la cebra común, Equus quagga; la cebra de Grant, como Equus garantía; la cebra de Chapmann, como Equus chapmannae; la de Böhm , como Equus boehmi; la de Burchell como Equus burchelli, y la cuaga como Equus quagga. Por último, la cebra de Grévy es Equus grevyi.
