Era abogado, profesor, radical y masón. Antes de llegar a la presidencia fue diputado, senador y ministro de Justicia e Instrucción Pública y del Interior.
Nació el 6 de febrero de 1879, en Pocuro, cerca de Los Andes. Cursó su educación secundaria en el Liceo de San Felipe. Estudió pedagogía en Castellano y Filosofía y después Derecho en la Universidad de Chile. Con posterioridad, estudió Hacienda Pública y, en 1910, Derecho Administrativo y Financiero en la Universidad francesa de La Sorbona.
Ejerció como profesor de Educación Cívica, Castellano y Filosofía en la Escuela de Suboficiales del Ejército, el Liceo Barros Borgoño y el Instituto Nacional.
En 1916 se casó con su prima Juana Rosa Aguirre Luco. No tuvieron hijos.
En 1927 se exilió en Europa, radicándose en Francia y luego en España.
Ganó la elección presidencial de 1938, siendo el candidato del Frente Popular.
Murió de tuberculosis el 25 de noviembre de 1941, sin concluir su gobierno.
El Frente Popular
En mayo de 1936 se formó un bloque político de izquierda, integrado por socialistas, comunistas, democráticos y la Confederación de Trabajadores de Chile (CTCH).
El Partido Radical (PR) estaba dividido en un grupo que quería formar parte de este bloque y otro grupo que se oponía a cualquier tipo de alianza con los comunistas. Sin embargo, las diferencias con el gobierno de Arturo Alessandri hicieron que este partido se acercara a la izquierda.
En mayo de 1937, en la XII Convención Radical se aprobó suscribir con los partidos de izquierda un nuevo pacto llamado «Frente Popular», a semejanza de las alianzas gobernantes en Francia y España.
Los postulados más importantes del Frente Popular fueron el respaldo al régimen democrático, la libertad, la solidaridad social y la lucha contra el fascismo y el imperialismo internacional.
Esta coalición apoyó la elección presidencial del radical Pedro Aguirre Cerda, que logró un estrecho triunfo sobre Gustavo Ross, el candidato de conservadores y liberales.
Su llegada al gobierno
Los candidatos para la elección presidencial del 25 de octubre de 1938 eran: Pedro Aguirre Cerda, respaldado por el Frente Popular; Gustavo Ross, el abanderado de la derecha, y Carlos Ibáñez del Campo, apoyado por el Movimiento Nacional Socialista y otros partidos pequeños.
El programa del postulante radical planteaba el mejoramiento de las condiciones de vida de la población, mediante el fomento estatal de la producción y la industrialización, la protección de los trabajadores y la extensión de la cobertura de la educación.
El 5 de septiembre de 1938 se produjo un intento de golpe de Estado realizado por un grupo de jóvenes nazis (Matanza del Seguro Obrero). Después de este incidente, Ibáñez retiró su candidatura, adhiriendo a la de Aguirre Cerda.
El triunfo fue estrecho. El candidato radical asumió el gobierno el 24 de diciembre de 1938.
El peor de los sismos
El 24 de enero de 1939 se produjo un fuerte terremoto, que fue catalogado como magnitud 7,8 en la escala de Richter e intensidad 10 en la escala de Mercalli.
Aunque se percibió desde Santiago hasta Temuco, entre la costa y Mendoza, la zona entre Talca y Concepción fue la más dañada. La ciudad de Chillán quedó completamente destruida.
Este movimiento telúrico es el que más muertos ha causado en la historia de Chile, aunque la cifra oficial fue de 5.648 muertos, se calcula que en realidad fueron más de 30 mil.
La destrucción de viviendas fue de proporciones incalculables y la pérdida de la producción agrícola se estimó en una cuarta parte del total del país.
Para enfrentar la catástrofe y con la oposición de la derecha, se crearon la Corporación de Reconstrucción y Auxilio, que tenía la finalidad de conceder préstamos a largo plazo a los agricultores e industriales y liderar la reconstrucción de la zona afectada, y la Corfo.
La Corfo
Para recuperar y desarrollar la economía tras el desastroso terremoto del 24 de enero, el 29 de abril de 1939 se promulgó la ley de Reconstrucción y Auxilio y Fomento de la Producción, que creó la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo).
Su función era elaborar un plan para incrementar la producción nacional y reducir las importaciones, impulsando la creación de nuevas industrias.
A través de créditos, aportes de capital e intervenciones directas, la Corfo dio un fuerte impulso a la minería, la electrificación del país, la agricultura, el comercio y el transporte.
El término de la II Guerra Mundial, que dificultaba la obtención de créditos externos y la transferencia de tecnología, permitió a la Corfo crear empresas estatales básicas para la industrialización, como la Empresa Nacional de Electricidad (1943), que llevó a cabo un plan de electrificación nacional; la Compañía de Acero del Pacífico (1946), la Empresa Nacional del Petróleo (1950) y la Industria Azucarera Nacional (1953).
«Gobernar es educar»
Este fue el lema de Pedro Aguirre Cerda, quien explicaba que «la educación es el primer deber y el más alto derecho del Estado; en consecuencia, social y jurídicamente considerada, la tarea de educar y enseñar es función del Estado».
Cabe señalar que Aguirre Cerda fue profesor, presidente de la Sociedad Nacional de Profesores y ministro de Justicia e Instrucción Pública -de Juan Luis Sanfuentes-, cargo en el que impulsó la ley de Instrucción Primaria Obligatoria.
Durante su gobierno se crearon más de mil escuelas y 3.000 empleos para profesores. El número de alumnos de las escuelas primarias creció de 110 mil en 1938 a cerca de 620 mil en 1941.
Además y atendiendo a la tarea de aumentar la capacidad de producción del país, se fomentó la educación técnica, industrial y minera, fundándose numerosas escuelas especializadas.
En 1940 había alrededor de: 4.200 escuelas públicas con 13.800 profesores, 87 liceos con 31.000 alumnos, 16 instituciones comerciales con 7.000 alumnos y 180 colegios particulares.