La organización de una biblioteca escolar es fundamental para atraer el interés de los estudiantes. Aunque, en primer lugar, hay que saber cómo levantar una biblioteca para luego dedicarse al ordenamiento.
Primeros pasos para una biblioteca escolar
1.- Tener los libros. Recuerda que a veces no todos sirven a tus propósitos. Por ejemplo, si recolectas libros solicitando a tus compañeros llevar uno desde sus casas, muchas veces recibirás textos muy antiguos, rotos o incluso ¡incompletos!.
Por eso, si juntas libros por donaciones, tendrás que seleccionar los que sirven y los que no. Aquellos que no cumplan su cometido, es mejor que los descartes de inmediato, porque muchas veces a las bibliotecas llegan cosas que no sirven a nadie y que nadie se atreve a botar a la basura.
2.- Seleccionar los libros y separarlos por categorías, es decir, por temas, ya sea ciencia, literatura, deportes, etcétera.
3.- Contar con un espacio. Puede ser un espacio en la sala de clases o en una pequeña sala de tu escuela. Si la vas a hacer en la casa, cualquier rincón sirve. Eso sí, cualquiera que sea el lugar que elijas, este debe ser limpio, seco y protegido. ¡Nunca al aire libre!.
Los libros tienen que ser ubicados en estanterías donde se ordenará la colección
4.- Vamos a comenzar el ordenamiento del siguiente modo: Registrar los libros y dales a cada uno un número de registro, el que podrías anotar en un cuaderno.
Ver ejemplo en lámina: ¿Cómo registrar los libros de tu biblioteca?
Cuando los tengas registrados, anótales su número a cada libro. Puedes, adicionalmente pedir un timbre a tu colegio para que cuando los prestes, tu amigo sepa que el libro es de la biblioteca y al desocuparlo lo devuelva para que otro niño también pueda leerlo.
Separa los libros por temas, ver forma de clasificación en la lámina Clasificación de libros por tema.
Ordénalos por temas en las estanterías.
Ahora veremos un sistema de préstamo de libros de la biblioteca escolar o personal. Para ello hay reglas que es bueno seguir.
1.- Los libros de referencia (almanaques, diccionarios, atlas) no es recomendable prestarlos para la casa, porque son libros que todos los niños necesitan consultar. Deja que los usen solo en el colegio.
2.- Cuando prestes libros, por ejemplo novelas, cuentos, etcétera, debes anotar a quien se lo prestas: nombre de niño, el libro que se lleva, la fecha en que se los prestas y la fecha en que debe devolverlo.
3.- Es recomendable que crees entre tus compañeros los hábitos de responsabilidad y de cuidado. Un libro rayado o incompleto, no le servirá a otro niño y quizás debas desecharlo.
Por Mónica Clavel Gutiérrez
Bibliotecaria Centro de Documentación de Copesa
