La gramática se define como el estudio de las reglas y principios que regulan el uso del lenguaje dentro de la oración, pero esta ciencia se subdivide en niveles específicos donde cada cual se preocupa de un área determinada. A continuación te presentaremos la definición de cada uno de ellos.
Clásicamente el estudio de la lengua se divide en cuatro niveles:
- Nivel fonético-fonológico.
- Nivel sintáctico-morfológico.
- Nivel léxico-semántico.
- Nivel pragmático.
A veces se restringe el uso del término gramática a las reglas y principios que definen el segundo de estos niveles.
Sin embargo, la separación de los niveles no es totalmente nítida porque ciertas reglas gramaticales se realizan en el nivel fonético-fonológico e igualmente existen parámetros o criterios semánticos que sirven para decidir cuándo una determinada construcción es agramatical.
¿Qué es la gramática?
La gramática rige la estructura y uso del lenguaje. Este conjunto de reglas permite conocer cómo se deben utilizar las palabras y las frases para construir oraciones y comunicarse en cualquier idioma.
Dentro de la gramática se encuentran elementos tan relevantes como la ortografía, la puntuación, la sintaxis y la semántica.
¿Por qué es importante la gramática? Su relevancia se sustenta en que es un elemento fundamental para la comunicación efectiva. Sin un conocimiento sólido de las reglas gramaticales, sería difícil transmitir ideas coherentes y comprensibles.
Un ejemplo de ello son los errores gramaticales: el uso incorrecto de una coma puede cambiar el significado completo de una oración. Aquí te compartimos un ejemplo:
- Antonia, dice que vengas -> En este caso, le dicen a Antonia que otra persona quiere verla.
- Antonia dice que vengas -> En este ejemplo, Antonia quiere verte a ti.
¿Qué es la fonética?
La fonética es la rama de la lingüística que estudia la producción y percepción de los sonidos de una lengua en sus manifestaciones físicas. Sus principales ramas son: fonética experimental, fonética articulatoria, fonemática y fonética acústica.
¿Qué es la morfología?
La morfología es la rama de la lingüística que estudia la estructura interna de las palabras para delimitar, definir y clasificar sus unidades, las clases de palabras a las que da lugar (morfología flexiva) y la formación de nuevas palabras (morfología léxica).
¿Qué es la sintaxis en gramática?
La sintaxis es una subdisciplina de la lingüística y parte importante del análisis gramatical que se encarga del estudio de las reglas que gobiernan la combinatoria de constituyentes y la formación de unidades superiores a éstos, como los sintagmas y oraciones.
La sintaxis, por tanto, estudia las formas en que se combinan las palabras, así como las relaciones sintagmáticas y paradigmáticas existentes entre ellas.
¿Qué es la semántica?
La semántica es el estudio del significado de las expresiones del lenguaje, es decir, del significado atribuible a expresiones sintácticamente bien formadas. La sintaxis estudia sólo las reglas y principios sobre cómo construir expresiones interpretables semánticamente a partir de expresiones más simples, pero en sí misma no permite atribuir significados.
La semántica examina el modo en que los significados se atribuían a las palabras, sus modificaciones a través del tiempo y aún sus cambios por nuevos significados. La lexicografía es otra parte de la semántica que trata de describir el significado de las palabras de un idioma en un momento dado, y suele exhibir su resultado en la confección de diccionarios.
¿Qué es la etimología?
La etimología es el estudio del origen de las palabras, razón de su existencia, de su significación y de su forma, según La Real Academia Española (RAE). Se estudia el origen de las palabras, cuándo son incorporadas a un idioma, de qué fuente, y cómo su forma y significado han cambiado.
En idiomas con una larga historia escrita, la etimología se trata de una disciplina relacionada con la lógica y la lengua histórica que estudia el origen de las palabras estudiando su significación originaria y su forma, así como los posibles cambios sufridos a lo largo del tiempo.
Además, utilizando métodos de lingüística comparativa, se puede reconstruir información de lenguas que son demasiado antiguas como para obtener alguna fuente directa, como escritura. Así, analizando otros idiomas relacionados, los lingüistas pueden hacer inferencias acerca de la lengua de la que son originarias, y su vocabulario.