Luis Florentino Juan Manuel Silvestre de los Dolores de la Carrera y Verdugo, nació en Santiago, un 20 de junio de 1791. Hijo de Ignacio de la Carrera y Cuevas, y de Paula Verdugo y Valdivieso. Fue el menor de los hermanos Carrera. Cursó sus primeros estudios en el Convictorio Carolino de Santiago, para posteriormente seguir una carrera militar.
Durante los gobiernos de José Miguel, alcanzó el grado coronel de artillería, y con ese rango combatió, a partir de1813 en diferentes batallas contra los realistas. Entre sus hermanos, era quien poseía mayores condiciones militares.
En 1813, al iniciarse la Guerra de la Independencia, Luis partió con sus tropas de artillería al Combate de Yerbas Buenas y al Sitio de Chillán. Esta experiencia resultó negativa para las fuerzas chilenas. Tras largos días de sitiar al enemigo que se encontraba al interior de la ciudad, en pleno invierno de 1813, sus tropas terminaron por retirarse. Luis, además combatió en la defensa de Talca.
Fue hecho prisionero por los realistas junto a José Miguel y conducido a Chillán. Después ambos fueron excluidos expresamente por los jefes patriotas del canje de prisioneros de guerra acordado en el Tratado de Lircay. Pese a esto, los realistas facilitaron la fuga de ambos hermanos con la esperanza de crear divisiones entre los independentistas.
Luis junto a Juan José, partió rumbo a Mendoza, ciudad en la cual apoyó a su hermano José Miguel en su disputa con el gobernador argentino, José de San Martín. Es importante señalar que Luis Carrera, desde el momento en que José Miguel fue separado de su cargo de Comandante en Jefe del Ejército en 1813 y reemplazado por O‘Higgins, sintió una profunda antipatía hacia éste.
En 1814, durante la lucha interna del bando patriota, Luis venció a Bernardo O’Higgins en el Combate de Las Tres Acequias.
Vida en el exilio
Una vez que San Martín terminó con la rivalidad interna entre los chilenos, todos los Carrera viajaron a Buenos Aires, donde realizaron actividades con el fin lograr el reemplazo de San Martín.
En aquella ciudad, Luis llegó a batirse a duelo con uno de los personajes más cercanos a O’Higgins, el irlandés Juan Mackenna, quien resultó muerto en el lance. Los detalles de este hecho fueron narrados al historiador Benjamín Vicuña Mackenna en 1853 por Antonio José de Irisarri, quien vivía con Juan Mackenna en la capital porteña.
Una noche, al volver a su alojamiento, Irisarri encontró sobre el escritorio una esquela de desafío enviada por Carrera. Al no hallarse el irlandés en casa, salió en su busca, pero no lo encontró sino hasta el día siguiente, cuando supo que en el pórtico del Cabildo se hallaba un cuerpo sin identificar que mostraba una herida de bala en el cuello. Algunos decían que había muerto en un duelo, otros que había sido asesinado. Irisarri reconoció el cadáver de Mackenna. Luis Carrera fue encarcelado y acusado de homicidio, pero nada se pudo comprobar en su contra.
Mientras José Miguel se encontraba en Estados Unidos, Juan José y Luis planificaban la forma de desplazar a O’Higgins y a San Martín. Estos preparativos se finiquitaron cuando arribó el hermano ausente, pero sus intenciones fueron descubiertas.
Luis partió hacia Mendoza, donde fue apresado. Fue sometido a juicio y, finalmente, condenado a fusilamiento junto a su hermano Juan José. Murió un 8 de abril de 1818.
