Nació el 28 de abril de 1875 en Kolocep, estado que en ese entonces formaba parte del imperio Austro-húngaro y que hoy pertenece a Croacia.
Llegó a Chile en 1892 junto a su hermano Vicko, atraído por la explotación del salitre. En un comienzo se instalaron en Iquique, donde comenzaron a vender carne y pescado. En forma paralela, ingresó al negocio del salitre mediante la compra de los créditos de la Compañía Salitrera Progreso al Banco de Chile. Esta sociedad fue el inicio de su gran imperio.
Posteriormente, adquirió una compañía naviera, hecho que le permitió el dominio de los envíos y venta del salitre. También fue representante de una importante empresa inglesa productora de carbón. Luego adquirió un banco, lo que le ayudó a controlar sus transacciones comerciales.
Sin embargo, el salto económico más importante que logró fue en 1923, cuando compró a los ingleses la Compañía Lautaro, que era la más grande de Chile. Con la adquisición de esta empresa, llegó a controlar cerca del 30% de las ventas totales del salitre.
En 1928, y ante la inminente crisis del nitrato vendió todas sus acciones al grupo norteamericano Guggenheim Bros.
Luego de salvar su capital, invirtió en sociedades agrícolas, destacándose la compañía Agrícola San Vicente (en Los Andes) y la sociedad Agrícola Ñuble Rupanco.
Al año siguiente, se retiró a vivir a su residencia construida en el cerro Alegre de Valparaíso, llamada palacio Baburizza. Esta, en la actualidad, es el museo de Bellas Artes de ese puerto.
Murió el 13 de agosto 1941 en la ciudad de Los Andes, a la edad de 66 años.
¿Sabías que?
Baburizza no dejó herederos directos, por lo que repartió su FORTUNA en donaciones. Por ejemplo, dio capital y terrenos para el establecimiento del Jardín Botánico de Viña del Mar.
