Este artista catalán, nació en Reus, una provincia de Cataluña. Bajo el patrocinio del industrial Eusebio Güell, completó sus obras más importantes , incluyendo el Palacio Güell, en el que se demoró 4 años en construirlo (1885 a 1889) y el Parque Güell (1900 a 1914). En 1883 Gaudí fue designado como el arquitecto oficial de la Iglesia de la Sagrada Familia, en Barcelona, que fue su obra maestra pese a que murió antes de terminarla. Su arquitectura básica está formada de torres semicubistas y mosaicos hechos de piedras, los que dominan enteramente el cielo de Barcelona.
Estilos de un creador
El estilo de Gaudí es una mezcla de diferentes tendencias, porque su creatividad surge con la experimentación, es decir, con la modificación constante de su estilo. Lo que Gaudí busca es experimentar las grandes posibilidades que da el hacer una obra monumental; como por ejemplo expresar el movimiento del mar en un edificio a orillas de la playa, o el verde de la vida en la naturaleza a través de esculturas instaladas en un parque.
En la historia del arte el hombre ha creado numerosos estilos y Gaudí ha sido capaz de reunir varios de ellos en sus creaciones. Para comprender más la obra de este artista sería bueno entender lo que busca expresar en la temática de sus monumentales edificios y esculturas:
* Estilo neogótico:Se caracterizan por tener colores oscuros y que, cuando el espectador se refleja en la obra, tiene una sensación de misterio. Sus formas son curvas y pretenden reflejar tristeza e inconformismo, Gaudí no tiene esa intención, pero es este estilo el que le da su toque personal.
* Estilo cubista: usa con frecuencia las formas geométricas, generalmente los círculos o las líneas de diferentes formas para otorgar dinamismo a las figuras que crea. Rechaza a los objetos tal como están en la realidad.
* Estilo surrealista: mediante sus enormes construcciones busca reflejar formas que , de alguna manera son incomprensibles, y que buscan expresar arte antes que sentimientos. «La obra de Gaudí no se ve, solamente se siente en el interior», dijo el crítico de arte Pedro Celedón.
