Nació en Casablanca, en los alrededores de Valparaíso, el 7 de agosto de 1883. Fue hijo de Julio Gordon Fernández y Mercedes Indalicia Vargas. Estudió en Santiago, en los liceos San Agustín y Miguel Luis Amunátegui.
Dada su temprana facilidad y afición por el dibujo, las costumbres de la época indicaban que debía estudiar Arquitectura y se matriculó en la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Chile. Sin embargo, sus propios profesores le aconsejaron cambiarse a Bellas Artes, al descubrir su aguda sensibilidad plástica y su escaso interés por la técnica arquitectónica.
En 1903 se matriculó como alumno de la Escuela de Bellas Artes, donde fue discípulo de Cosme San Martín, Pedro Lira, Álvarez de Sotomayor y Juan Francisco González. En 1912 siguió un curso con el muralista José Backhaus.
Hacia 1910 sus pinturas fueron bien acogidas, y recibió elogios y medallas en Chile y el extranjero. El mismo año colaboró con Pedro Subercaseaux en el álbum El Abrazo del Estrecho, que se obsequió al Presidente argentino Julio Roca.
También comenzó su labor como grabador, ilustrador y dibujante de las revistas Selecta, Zig-Zag y Pacífico Magazine, obteniendo el sueldo necesario para mantener su hogar, recientemente formado con Antonia González Reyes.
Miembro de la Generación del Trece
Así se llamó al grupo que participó en la exposición colectiva realizada en una sala de El Mercurio en 1913. Entre sus principales miembros estaban: Alfredo Lobos, Agustín Abarca, Guillermo Vergara, Exequiel Plaza, Pedro Luna y Arturo Gordon.
Decenios de silenciorevivieron con la Generación del Trece. Arturo Gordon se dedicó a las escenas de las costumbres populares, sin acudir a la nota objetiva y descriptiva, sino al compromiso emocional con lo que pintó, los sectores populares urbanos, mostrándolos a través de sus ritos religiosos ancestrales. Así surgieron cuadros maestros como: Velorio del Angelito, La Zamacueca, Novena del Niño Dios, El Sarao y Nocturno.
Galardones y encargos
En 1921 Galdames ganó en Chile la Medalla de Oro del Salón Oficial y un premio en el Certamen Edwards, que le valió varios encargos del gobierno. Su pincel dio luz a los grandes lienzos que decoran las escaleras y el acceso al segundo piso de la Biblioteca Nacional, concluidos en 1926.
Tres años después, se le encomendó realizar, junto al pintor Laureano Guevara, la decoración del Pabellón de Chile en la Exposición Internacional de Sevilla, obteniendo una Medalla de Oro y un Primer Premio. También fue distinguido en 1934 y 1936.
Entre 1936 y 1944 vivió en Viña del Mar, donde se desempeñó como profesor de la Academia de Bellas Artes de esta ciudad. Aquejado de cáncer, fue trasladado a Santiago, donde falleció el 27 de octubre de 1944.