La mansión que Shakespeare se compró en Stratford on Avon (1610), después de lograr una buena fortuna con sus obras.
En sus comienzos en Londres, Shakespeare trabajó como actor en la compañía teatral Chamberlain’s Men, más tarde llamada King’s Men, en los dos teatros que esta poseía, El Globo y Blackfriars. Sin embargo, al poco tiempo comenzó su carrera literaria, que se suele dividir en cuatro etapas. El autor extraía los temas de obras de crónicas de su tiempo, así como de cuentos y narraciones ya existentes, tal y como era costumbre en aquellos años.
La obra Romeo y Julieta, escrita en 1605, es una de las más conocidas y populares de Shakespeare. En esta novela, el amor busca realizarse aunque sea fuera de este mundo.
La faceta poética
Shakespeare también tuvo la reputación de brillante poeta. Los poemas eróticos, Venus y Adonis (1593) y La violación de Lucrecia (1594), junto a Sonetos (1609) y algunos poemas menores constituyeron toda la producción «no dramática» de este autor.
Hasta hoy, los Sonetos han sido objeto de un profundo análisis, debido a las alusiones autobiográficas y a la intensidad lírica y poderosa imaginación expresiva, que los ubicaron entre las cumbres de la poesía británica.