Una vez, en una academia muy bonita, había una niña de séptimo año y un niño de quinto. Habían muchos más, pero les estoy nombrando a los principales.
Pasaron dos semanas y al niño le empezó a gustar la niña de séptimo. Él creía que porque a él le gustaba, podía hacer lo que quisiera con la niña, pero la niña no se dejaba. Él insistió hasta que ella lo pensó y decidieron pololear.
Pololearon durante un mes y luego terminaron, porque el niño era demasiado aprovechador con la niña y a ella no le gustó eso.
Pero el niño aún seguía enamorado de ella. Pasaron cuatro meses, los dos quisieron volver y tomaron la decisión finalmente.
Ellos siguieron juntos, pero el niño no se aprovechó más de ella.
Por: Ambar Vargas