Como ya sabes, el proceso de comprensión diferirá de una persona a otra, por lo tanto no se puede decir que haya unas habilidades tan determinantes que puedes ejercitar. Lo importante es tratar de aprender el proceso de comprender y saber cómo aplicarlo.
¿Qué tipo de factores determinan la comprensión lectora?
Los factores que pueden determinar la comprensión se agrupan desde aspectos:
Internos
1. La configuración mental del lector: depende en su totalidad de las competencias cognitivas del lenguaje que hayas desarrollado e internalizado. Al enfrentarte a un texto (o a una situación comunicativa), utilizas mecánicamente todas estas competencias que van a depender de muchos factores: morfológicos, sintácticos y semánticos. Cada uno de estos elementos va a participar cuando le corresponda en el proceso mental que ejecutas como lector, según el conocimiento y manejo que tengas de esa materia.
2. Los conocimientos previos y esquemas mentales: ambos elementos serán fundamentales en la comprensión, pues este proceso implica la interacción de ellos con la nueva información decodificada, para lograr la comprensión que se espera.
Externos
1. El lenguaje oral adquirido, según el ambiente: si te has desenvuelto en un ambiente cuyo lenguaje es limitado, seguramente tendrás mayores dificultades para comprender un texto. Por otra parte, si tu entorno posea un lenguaje rico en vocabulario y de correcto uso, estarás más capacitado para enfrentar un texto y comprenderlo de manera eficaz.
La motivación se puede lograr, en parte, cuando conoces los objetivos por los cuales lees y le encuentras sentido. Esta tarea en gran parte, debe estar a cargo de la persona que asuma el papel de facilitador, es decir, si la persona que te proporciona la lectura es capaz de hacer te ver, cuán útil, enriquecedora y productiva puede llegar a ser la lectura en su formación.
2. El ambiente donde se desarrolla la lectura
Debe cumplir ciertas condiciones para que puedas concentrarte en lo que lees, es importante que cuentes con la iluminación adecuada y otros factores que favorezcan tu atención en el texto.
3. Estado físico y afectivo
Puede que se hayan dado todas las condiciones antes mencionadas, pero es fundamental el estado físico y afectivo, puesto que si se encuentran alterados, podrían dificultar seriamente la comprensión. Ejemplo: si estás sufriendo una pena que te provoca llantos o distracciones, no podrás concentrarte en una lectura, y si lo haces, probablemente la comprensión será casi nula o limitada.