Si se produce una emergencia, hay que dar la alarma llamando inmediatamente al número 132 (número nacional).
Ante todo debes mantener la calma e indicar de qué se trata la emergencia, es decir, explicar si es fuego, humo, un accidente de tránsito, derrumbe, derrame de combustible, etc.
Tienes que dar la dirección exacta y las dos calles de la esquina más cercana para que lleguen sin problemas y sin perder ningún minuto.
Luego indica el número de teléfono desde el que estás llamando, para que la persona que te está atendiendo pueda confirmarla y se comunique contigo por sí necesita más información.
Antes de colgar el teléfono escucha atentamente las instrucciones y preguntas que te pueden hacer.
En la cocina
No juegues nunca en la cocina. Es un lugar muy peligroso, sobretodo cuando hay fuego, ollas o teteras hirviendo o aparatos eléctricos funcionando. Recuerda que en este lugar de la casa hay muchas cosas que son inflamables. Las cortinas, paños de cocina, guantes para tomar ollas, envases plásticos, botellas de aceite, fósforos, papeles, manteles, etc., deben mantenerse a distancia de las fuentes de calor como la cocina, el horno, el tostador, cafeteras y otros.
No dejes las ollas o sartenes con los mangos hacia fuera, o en lugares inseguros.
Las quemaduras provocadas por aceite o agua hirviendo son dolorosísimas y muy difíciles de curar. Muchos niños, todos los días, llegan a los centros de urgencia con graves lesiones en sus cuerpos.
Fuego
Nunca juegues con fósforos, encendedores o con algún artículo que produzca fuego. Hay niños que al ver que su «inocente y entretenido juego» se ha transformado en un incendio, esconden los objetos inflamados bajo sus camas, closets o en armarios. Cuando se da la alerta, a veces es demasiado tarde.
Los niños no deben quedarse solos en una habitación o en la casa existiendo estufas, anafes, lámparas o velas encendidas.
Si te encuentras frente a una emergencia, como un incendio, sal de inmediato, no vuelvas a buscar nada. Tu vida es más importante. Lo siguiente es llamar a Bomberos. Pide a cualquier vecino que llame al instante marcando el 132.
Lo que te vamos a decir a continuación es muy fuerte, pero forma parte de la realidad. Si tus ropas llegaran a inflamarse, en cualquier circunstancia, cubre tu cara con las manos y como dice bomberos la orden es «detenerse, caer y rodar».
Cualquier quemadura debe ser tratada por personal competente. Jamás uses hielo porque también quema. Lo único que debes hacer es ubicar la herida bajo un chorro de agua fría.
Ahora si estás en algún lugar donde comienza a salir humo, jamás trates de cruzar a través de él. Arrástrate debajo del humo manteniendo la cabeza a una distancia aproximada entre 30 y 60 centímetros del suelo.