La rayuela es un juego de adultos, tradicional en nuestro país. Consiste en lanzar tejos circulares y metálicos hacia una raya trazada con tiza en el suelo o hacia una lienza colocada a los ancho del extrenmo de la cancha.
Cada jugador tiene dos tejos y el éxito consiste en que caigan sobre la raya o la lienza. Así se producen «el punto quemado«. Una vez que se completa el número de puntos acordado, el juego se termina.
La rayuela nació en los cuarteles militares. Los soldados la idearon sobre la base de antiguos juegos españoles. Trazaron canchas en los patios de los cuarteles, entreteniéndose durante largas horas. Fue muy conocido sobre todo en el cuartel Dragones de La Reina, al fondo del Palacio de Gobierno.
Sin embargo, pronto este juego salió de los cuarteles, adaptándolo el pueblo entero, en especial los criollos y mestizos, que se encargaron de mantenerlo durante toda la Colonia.
Tanto arraigó en las costumbres populares, que llegó hasta nuestros días, sobretodo en campos y aldeas, sin dejar de lado los pueblos y las grandes ciudades, donde se han creado los «Clubes de Rayuela«.