Mercurio, mensajero de los dioses, representado con un casco alado
– Diámetro ecuatorial: 4.878 Km
– Elementos constituyentes: hierro, oxígeno, silicio, magnesio, aluminio, calcio, níquel
– Temperatura superficial: 327 a -183 grados Celsius
– Gravedad superficial: 0,38
– Velocidad de escape: 4,3 km./s
– Distancia media al Sol: 0,387 unidades astronómicas
– Período de rotación: 58,65 días terrestres
– Satélites: ninguno
Por su proximidad al sol, Mercurio es visible bajo la luz tenue del amanecer y del crepúsculo. Los astrónomos griegos lo denominaron Apolo cuando aparecía como estrella de la mañana y Hermes en sus apariciones vespertinas.
Mercurio, dios de las sandalias aladas y mensajero del Olimpo (Hermes) ha perpetuado su nombre en el planeta como referencia a la rapidez de su movimiento sobre el firmamento.
Mercurio es el primer planeta del Sistema Solar, por su proximidad a la estrella y el de menor tamaño.
Conocido por los antiguos astrónomos sumerios y griegos, Mercurio representó para la física uno de los más grandes enigmas. La determinación de su órbita desafió trabajos tan eminentes como los de Johannes Kepler e Isaac Newton que no lograron explicarla completamente.
Correspondió a Albert Einstein en 1915 explicar con su teoría de la relatividad general el movimiento completo de Mercurio lo que constituyó uno de sus más tempranos y espectaculares éxitos. Fue esta interpretación la que abrió las puertas a la comunidad científica internacional para posteriores y reveladoras pruebas del comportamiento gravitatorio y electromagnético del planeta.