Martín Zilic, médico cirujano de la Universidad de Chile y Master of Sciencies en Cirugía General y en Cuidados Intensivos de la Universidad Católica de Lovaina, Bélgica, fue designado como Ministro de Educación por la Presidenta Michelle Bachelet.
Nacido en Calama, Zilic tiene 58 años de edad y milita en el Partido Demócrata Cristiano, PDC. Entre 1992 y 1994, se desempeñó como director del Hospital Clínico Regional de Concepción, hasta el momento de ser designado Intendente de la Región del Bío Bío por el Presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle, cargo que ejerció durante seis años, hasta el 2000.
Como autoridad máxima del gobierno regional, le correspondió llevar a cabo las negociaciones y la ejecución del cierre de las minas de carbón, proceso que pese a su complejidad social se completó satisfactoriamente dentro de un clima de normalidad.
A partir del año 2000, y hasta su nombramiento como titular de Educación el Dr. Zilic integró la Comisión Nacional para el Desarrollo de la Biotecnología y el año 2004 fue el responsable máximo de la realización en Chile del Foro Global de Biotecnología. También fue director del Programa Integral de Desarrollo Regional de la Universidad de Concepción y jefe de la Unidad de Pabellones y Anestesia del Hospital Regional penquista.
Según cercanos de la Universidad de Concepción, el doctor Mártín Zilic se caracteriza por su calidez y por ser «muy mediático». Es acelerado y siempre tiene opinión respecto a los más variados temas», indicó una de las periodistas del Departamento de Comunicaciones del citado plantel penquista, invitada a definirlo.
En el Colegio de Profesores
En su primer día hábil en el cargo, el ministro llegó hasta la sede del magisterio para conversar con los dirigentes del Colegio de Profesores. Allí sostuvo que no se puede seguir avanzando sólo en cobertura, que a su juicio ha sido «espectacular» durante los gobiernos de la Concertación, pero lo que está pendiente, dijo, es mejorar la calidad.
«Tenemos que examinar cómo generar estándares y medir esa calidad y cómo esa calidad tiene alguna consecuencia en los sostenedores de colegios públicos y privados», dijo. Agregó que la calidad de la enseñanza se mejorará no sólo con políticas de gobierno sino con políticas de Estado y dijo que para ello tiene que incorporarse en este trabajo toda la ciudadanía.
Recordó, además, que los países hoy no compiten porque sólo tengan materias primas y que Chile en 1850 era el país número 20 de las naciones más ricas del mundo y Argentina era el país número 11. «Pero hoy si queremos estar entre los 10 primeros, o los top 20 no vamos estar allí porque tenemos cobre, ni porque tenemos pescados y árboles para exportar. Vamos a crecer sólo si tenemos conocimientos y si somos capaces de crear nuevos conocimientos y la sociedad del conocimiento es lo más importante y eso parte incluso antes que el niño nazca», expresó, agregando que la tarea es que se crezca con calidad y equidad.
Indicó que se está conformando un grupo que trabajará por la calidad y que este conjunto analizará esto con las universidades, con el Colegio de Profesores y los sostenedores (representantes de colegios municipalizados y particulares subvencionados) para determinar cuáles son los estándares y cómo se va a medir esa calidad.
«Actualmente hay una sola medición que es el Simce (Sistema de Medición de la Calidad de la Ecucaciòn) y tenemos una segunda medición que es al final de la enseñanza media que es la Prueba de Selección Universitaria (PSU), una medición que se hace prácticamente cuando todo está terminado», reseñó. Precisó que hay que buscar mecanismos que permitan ir reconociendo el nivel que muestran los alumnos en el transcurso de sus estudios y por allí se va ir buscando el método.
Por su parte el presidente del gremio, Jorge Pavez, sostuvo que en la reunión con el ministro le plantearon desde el punto de vista gremial los desafíos que tienen por delante, entre estos la próxima negociación salarial y el interés de que se cree una carrera profesional para ellos.
Pavez le manifestó que los profesores están interesados en que se evalúe lo que significa la municipalización de la educación; el financiamiento de la educación chilena, y la preocupación por el creciente aumento de la enseñanza particular en menoscabo de la educación pública.
Evaluación docente
Respecto a la evaluación docente, la cual unos cinco mil profesores rechazaron el pasado año, el ministro dijo que ha conversado con dirigentes de esos maestros que no cumplieron ese paso y ellos le señalaron que no están en contra que sean evaluados sino que tienen reparos a la forma como han sido examinados.
«Lo que tenemos que crear aquí son niveles de confianza para saber que todos somos evaluables; los profesores evalúan a sus alumnos, los profesores tienen que ser evaluados, los ministros de Estado son evaluados, los médicos son evaluados, todos tenemos una evaluación por delante», sostuvo.
Expresó que en esta última medición de 18 mil profesores que debieron ser evaluados, dos mil justificaron su no evaluación, más de 10 mil dieron los exámenes y de esos diez mil, «un porcentaje bajísimo resultó reprobado», señalando que eso quiere decir que la calidad de los profesores «es excelente». Indicó que de los cinco mil que no quisieron evaluarse él está seguro que no más del tres por ciento de ellos hubiese reprobado la evaluación.
«Por lo tanto, el tema central se llama confianza, y yo lo que quiero decir a los profesores es que estoy dispuesto a trabajar e interactuar con ellos para crear las confianzas necesarias para que ellos se evalúen», finalizó diciendo Zilic.
