La población y su nivel de vida
A pesar de que el aumento comercial característico de la globalización genera mayor riqueza a los países, no es menos cierto que gran parte del planeta sigue todavía evidenciando amplias desigualdades sociales, situación que es reconocida incluso por interlocutores tan apegados a la economía de mercado como lo es el Banco Mundial.
Esta institución, en su Informe sobre el Desarrollo Mundial 2000-2001, admite que en la actualidad el mundo se caracteriza por una gran pobreza en medio de la abundancia, y que de un total de 6 mil millones de habitantes, casi la mitad de ellos viven con menos de 2 dólares diarios, y alrededor de 1.200 millones con menos de 1 dólar al día.
Este mismo documento incluso admite que, no obstante el mejoramiento en las condiciones de vida, todavía persiste una situación de miseria en vastas regiones, debido a que la distribución de esas mejoras ha sido muy desigual.
Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI), en su informe anual del año 2000, afirma que las naciones más pobres no han podido integrarse a los mercados mundiales, y por lo mismo todavía no pueden obtener los beneficios que aporta la economía interconectada. De acuerdo con este mismo reporte, los más afectados por la desigualdad mundial son las mujeres y los niños, ya que en los países menos desarrollados más de 130 millones de niños y niñas en edad escolar no tienen ni siquiera instrucción primaria. Además, una cifra de 250 millones de niños se ven obligados a trabajar para subsistir ellos y sus familias.
Otro aspecto que caracteriza la sociedad globalizada es la precariedad del trabajo, es decir, la permanencia limitada en un empleo. Un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre Empleo en el Mundo, determinó que un tercio de la población activa mundial, o sea cerca de mil millones de personas, se encuentra en situación de desempleo o subempleo.
El aumento en las migraciones también se asocia a la globalización. En la actualidad se calcula que 145 millones de personas se encuentran residiendo legalmente fuera de sus países de origen. A esta cifra se debe añadir un número cada vez más elevado de inmigrantes que viven en situaciones de ilegalidad y en condiciones precarias.
Los factores que favorecen algunos de estos movimientos migratorios, como, por ejemplo, el de los africanos subsaharianos y latinoamericanos a Europa, y que los han incentivado en la sociedad globalizada es la información permanente por parte de los medios de comunicación, la disminución en el costo de los medios de transporte y el funcionamiento cada vez mayor de las mafias traficantes de inmigrantes ilegales.