El 11 de noviembre de 1918 marcó el fin de la Primera Guerra Mundial, uno de los enfrentamientos bélicos más violentos y devastadores de la historia de la humanidad.
Tras el triunfo de la revolución bolchevique, Trotsky se hizo cargo de los Asuntos Exteriores. Su principal tarea fue poner fin a la participación de Rusia en la Primera Guerra Mundial.
Inicio del fin de la Primera Guerra
El 3 de marzo de 1918 se firmó la «paz de Brestlitovsk». Rusia abandonó la guerra, pero tuvo que renunciar a Finlandia, Ucrania, Polonia, Moldavia, Letonia, Estonia, Lituania, y ceder Kars y otros enclaves a Turquía.
Además se pagó una fuerte indemnización de guerra a Alemania.