A poco más de un mes de constituido el Congreso, José Miguel Carrera y su hermano planearon el primer golpe contra él. La finalidad primordial era borrar a Martínez de Rozas del plano político.
El golpe fue dado por los Carrera el 4 de septiembre de 1811 sin ningún contratiempo militar. Sin embargo, los principios defendidos eran poco claros y José Miguel tuvo dificultades en clarificar ante el Congreso los objetivos de la acción que encabezaba.
A fin de no confundirse, los diputados pidieron a los golpistas que pusieran por escrito las peticiones populares que decían representar.
Al final José Miguel Carrera no fue elegido como miembro de la nueva Junta que se formó, y en el desorden Martínez de Rozas sacó ventaja y se hizo elegir.
En la vida de la patria naciente quedaba claro que la inmensa mayoría de sus protagonistas eran patriotas. Sus conflictos no estaban, pues, en favor o en contra de la Independencia, sino más bien eran luchas personales por la ambición de poder.
José Miguel Carrera toma el poder
El fallido golpe de septiembre de 1811 no desalentó a los Carrera, quienes insistieron en una acción de fuerza el 15 de noviembre de dicho año.
José Miguel Carrera integró una terna que contemplaba, además, a Martinez de Rozas como representante del Sur y a Gaspar Marín por el Norte.
No era fácil convencer a los políticos sugeridos que acompañaran la aventura carrerista. Los hechos les dieron la razón, pues, mientras se hacían las consultas para reemplazar a Martínez de Rozas por Bernardo O’Higgins, José Miguel entró en acuerdos con realistas y patriotas y se consolidó en el poder, clausurando el Congreso.
Menos de un año después, aliándose con el realista Juan Manuel Benavente, logró deshacerse definitivamente de su enemigo político, Martínez de Rozas, mandándolo a Argentina.
¿Qué hizo Carrera en el poder?
Durante la llamada dictadura de Carrera se promulgó la primera Constitución que tuvo nuestro país, se publicó el diario «La Aurora de Chile» , se establecieron relaciones con Estados Unidos y se creó el primer símbolo patrio: la bandera azul, blanca y amarilla que caracterizó a la Patria Vieja.
Ante la amenaza hispana de restablecer su autoridad, el Senado decidió suspender la Constitución, nombrar una nueva Junta de Gobierno y designar a Carrera como general en jefe de las tropas encargadas de detener la marcha de los españoles que comenzaban a atacar por el sur.
La labor militar de Carrera fue secundada por O’Higgins. Ambos dieron muchas batallas en contra de las tropas realistas, pero también protagonizaron muchas peleas entre ellos, las que culminaron en 1814 con una verdadera guerra civil.
Las luchas internas debilitaron de tal modo a los patriotas, que cuando el brigadier Mariano Osorio, al mando de los Talaveras, comenzó su avance hacia Santiago, las tropas nacionales estaban absolutamente diezmadas.
Carreristas y o’higginianos depusieron sus odios personales para unirse contra el enemigo español. Pero ya era tarde y la consecuencia de las divisiones internas se sintió en el sitio de Rancagua, en donde los patriotas fueron derrotados, abriendo el camino a un nuevo período de dominación española.