La mayor parte de científicos y antropólogos postulan que la especie humana está compuesta por una única raza aunque ésta se divide en diferentes orígenes étnicos, que a su vez se dividen en pueblos. Los cuatro orígenes étnicos principales, que retoman en parte la clasificación original de Johann Friedrich Blumenbach, son el caucasoide, negroide, mongoloide y australoide.
Este tipo de teorías antropológicas aparecieron en los años 1960 como reacción frente a las teorías científicas relativas al predeterminismo biológico y a fenómenos como el segregacionismo y la discriminación racial, presentes por aquel tiempo en el contexto de los países occidentales.
En la antropología moderna la distinción entre factores biológicos y étnicos o culturales propiamente dichos está mejor definida. Ello se debe a los enfoques multidisciplinarios presentes en las ciencias sociales contemporáneas.