La Nasa concluirá este fin de semana la celebración del 20 aniversario del Hubble, el telescopio espacial que abrió los horizontes de la astronomía y que en unos años será un trozo más de la chatarra que gira en torno a la Tierra.
Los actos de celebración se han realizado en todas las oficinas nacionales de la Nasa, que inició la conmemoración con la difusión este mes en su sitio de internet de las fotos más espectaculares del universo captadas por el telescopio.
Y para conmemorar esta fecha, la agencia espacial publicó hoy una imagen captada entre el 1 y 2 de febrero de este año de una región de formación de estrellas en la Nebula Carina.
Estas fotografías forman parte del libro «Hubble A Journey Through Space and Time» que incluye 20 de las mejores imágenes seleccionadas por astronautas y científicos de la Nasa.
Las imágenes seleccionadas por astronautas y científicos de la agencia espacial muestran el nacimiento y muerte de estrellas, la colisión de galaxias y al universo en las primeras etapas de su formación.
Pero la Nasa no sólo ha hecho gala de las fotografías del cosmos tomadas por el observatorio, que es un proyecto conjunto de la Nasa y la Agencia Espacial Europea (ESA) sino que también ha difundido los descubrimientos conseguidos por otros instrumentos, como su espectrógrafo y sus cámaras de alta resolución.
Entre ellos se incluye el de la primera molécula orgánica en un planeta que orbita otra estrella, el descubrimiento de agujeros negros, la comprobación de que la materia negra existe, la formación de los planetas y observaciones que han permitido establecer que el universo está en expansión y que su edad es de unos 13.700 millones de años.
La molécula, de metano, fue descubierta por el Hubble en un exoplaneta que se encuentra a 63 años luz de la Tierra en la constelación Vulpecula. Se trata de un cuerpo mucho más grande que nuestro planeta y tan candente que los científicos consideran imposible que exista algún tipo de actividad biológica.
«Desde los puntos más cercanos a los más lejanos, aquellos que nunca se habían visto antes, hemos llevado al ciudadano de a pie en un viaje por todo el Universo», señaló Dave Leckrone, uno de los científicos encargados de sus operaciones.
Su historia
El Telescopio espacial Hubble (HST por sus siglas en inglés), comenzó su histórica proeza científica el 24 de abril de 1990 cuando partió hacia una órbita de 600 kilómetros sobre la Tierra instalado en el transbordador espacial Discovery.
Su nombre se debe a Edwin Hubble,uno de los más importantes astrónomos estadounidenses del siglo XX y mide 13,2 metros de largo y 4,7 metros de ancho con un peso de casi 12 toneladas.
El fin se acerca
Pero al observatorio que ha revolucionado el conocimiento del hombre sobre el universo le queda corta vida.
Tras la quinta y última misión del año pasado para reparar y mejorar sus sistemas que estuvieron inactivos durante casi tres años, la Nasa anunció que no se espera que siga funcionando más allá de 2014 y que poco a poco se apagarán sus sistemas para siempre.
Irremediablemente el complejo científico espacial que mide 13,2 metros de largo y 4,7 metros de ancho con un peso de casi 12 toneladas comenzará a ser atraído por la fuerza gravitatoria de la Tierra hasta desintegrarse en su choque con la atmósfera.
A partir de entonces el Hubble se sumará a los miles y miles de elementos que componen la chatarra espacial que gira en órbitas eternas en torno al planeta.
Pero no pasará mucho tiempo antes de que la Nasa lance al espacio otra nave que ponga en la órbita terrestre y lejos de la distorsión atmosférica otro observatorio espacial tal vez más poderoso que el Hubble.
Al anunciar sus planes para el futuro de la exploración del cosmos este mes en el Centro Espacial Kennedy, en la Florida, el presidente Barack Obama señaló su plan de asignar una inversión de tres mil millones de dólares con ese objetivo.