Nuestro cerebro está capacitado para discriminar entre los estímulos que desea procesar y los que no le interesan, como sucede, por ejemplo, cuando no pones atención en los avisos televisivos o a los distintos carteles publicitarios que se encuentran en las calles.
La capacidad del cerebro para procesar los estímulos percibidos por los órganos de los sentidos determina nuestras percepciones, o, en otras palabras, las sensaciones que recibimos.
Para que pruebes y juegues con tu capacidad sensorial de manera entretenida, haz la actividad que te proponemos a continuación.
Necesitas
– Dos cordeles de 30 cm.
– Cartón
– Lápices de colores
– Regla
– Tijera
– Compás
– Perforadora
Paso 1
Con el compás haz un círculo de 10 cm de diámetro en el cartón.
Paso 2
Después de que lo recortes, hazle dos orificios a cada lado con la perforadora.
Paso 3
Dibuja en cada una de las caras del círculo imágenes que puedan ser montadas. Por ejemplo, en un lado una jaula, y al otro un pájaro. Amarra un cordel a cada uno de los lados del círculo, pasándolos por los orificios.
Paso 4
Sosteniendo los extremos de los cordeles, da varias vueltas al círculo. Una vez que esté bien enrollado, estira los cordeles para que el círculo comience a girar. Observa las imágenes.
Conclusión
Si observas con atención, te darás cuenta de que al girar rápidamente, las imágenes parecen estar superpuestas, y el pájaro se ve dentro de la jaula.
