Séneca es uno de los filósofos más importantes de la antigua Roma. Nacido en Córdoba a principios del siglo I y murió en el año 65, fue reconocido como el maestro de Nerón.
Entre sus características destaca que no compuso tratados sino argumentos particulares. Séneca afirmaba que la virtud es suficiente para la felicidad y los bienes materiales y los honores estaban supeditados a la virtud.
«La filosofía es la ley del bien y del honesto vivir, y el que ha dicho que es la regla de la vida, le ha restituido su verdadero nombre», postuló Séneca al definir qué era la filosofía.
Vida y muerte de Séneca
Lucio Anneo Séneca nació en Córdoba, España, en el año 4 a.C. Reconocido como un filósofo, literato, orador y político, su obra influyó en la historia de la filosofía occidental. Famoso orador y escritor, se desempeñó como tutor del emperador Nerón.
En el año 49 asumió como preceptor de Nerón, quien entonces tenía 12 años. A los 17 años, cuando corría el año 54, Nerón asumió como el trono de emperador, lo que convirtió al pensador en uno de los guías del imperio.
En Roma Séneca conoció y aprendió de las doctrinas de Pitágoras y de Sextio a través de Soción de Alejandría.
Su estrecha relación con Nerón, que en un comienzo fue fructífera y llenó de prestigio, influencia y dinero al filósofo, pronto tendría un final dramático.
Séneca fue sindicado como cómplice de quienes planeaban asesinar al emperador Nerón. Y aunque no fue parte de la maquinación, un testimonio y el conocer a los traidores, contribuyó en que la acusación en su contra pareciera verosímil.
Aunque negó las acusaciones, Nerón calificó la actitud del filósofo como arrogancia, tras lo cual condenó a muerte a quien había sido su preceptor.
De esta manera, el filósofo optó por el el suicidio para terminar con su vida en el año 65 d.C.
Legado de Séneca
A pesar de su trágico final, su obra perdura a través de los siglos.
¿Por qué razón? Su filosofía se centraba en la ética y en la idea de que el ser humano tiene la capacidad de alcanzar la felicidad y la virtud a través del autocontrol y la moderación.
Para Séneca, la vida debía ser vivida con sabiduría y sin excesos, y la virtud era el camino hacia la felicidad.
Una de las obras más reconocidas de este filósofo es «De la brevedad de la vida». En ella habla sobre la importancia de aprovechar el tiempo y vivir en el presente.
Pese a ser escrito en el Siglo I, esta obra mantiene su vigencia y actualidad. En especial en la era de la distracción digital, la inmediatez y el rápido ritmo de la vida moderna.
Según postuló Séneca, el tiempo es un recurso limitado y valioso, el cual debe ser utilizado con sabiduría para alcanzar metas y la felicidad.
Virtud y moralidad
Otro punto que destaca en la filosofía de Séneca fue su énfasis en la virtud y la moralidad. Para Séneca, la virtud es el camino hacia la felicidad y la realización personal. Por ello debemos esforzarnos por vivir de acuerdo a nuestros valores y principios.
«La virtud es algo elevado, excelso y soberano, invencible e infatigable; el placer es algo bajo, servil, deleznable y caduco, cuyo asiento y domicilio son los burdeles y las tabernas», destaca Séneca en su obra titulada «Sobre la felicidad».
Además, en sus obras se realiza un especial énfasis en la moderación y la sobriedad. Ambos atributos siguen vigentes hasta la actualidad, y sus enseñanzas pueden ayudarnos a encontrar la felicidad, la virtud y el autocontrol en un mundo cada vez más complejo y caótico.