Cuando leemos ponemos en ejercicio muchísimas facultades, y una de las más importantes es el interpretar el código escrito y comprender el significado de las palabras. Existen infinidad de ellas, son tantísimas que resulta imposible contarlas. Las palabras nacen en el momento en que alguien las inventa para nombrar algo hasta que ya nadie las usa, entonces dejan de estar en circulación hasta desaparecer. Es la falta de uso lo que hace que una palabra ya no tenga sentido, o sea muy difícil recordarlo.
Cada día nacen más y más palabras nuevas porque siempre es necesario estar nombrando las cosas o explicando lo nuevo. Para poder descifrar el significado de una palabra que desconocemos, lo primero que debemos hacer es revisar el contexto general donde la palabra está inserta ya que dicho contexto puede brindarnos calves importantes a la hora de descifrar significados. Luego deberemos observar las palabras que rodean o acompañan a aquella que necesitamos descifrar pues ella podría contener información importante que nos pudiera ayudar.
Vamos a utilizar un ejemplo bien entretenido. En el fragmento del cuento que sigue podemos observar cómo unas palabras brindan información acerca de otras.
DE CÓMO RAPIGATO Y GATONTUELO SE HICIERON AMIGOS
(Fragmento) Escrito por Selene Ailín Sione (13 años)
En la lejana Ciudad Gatonesa, vivían muchísimos gatos. Pero sólo dos eran los más famosos y conocidos: Rapigato y Gatontuelo. Ellos eran dos personajes muy especiales en esa ciudad, y muy queridos por todos, pero entre ellos eran totalmente enemigos. ¡Es que eran tan diferentes el uno del otro!
Rapigato decía que le fastidiaba hablar con Gatontuelo porque era muy tonto y nunca tenía un tema interesante de qué hablar, además de ser súper lento para todo y muy aburrido. Gatontuelo, por su parte, opinaba que Rapigato era un fanfarrón insoportable, que tenía «aires» de súper héroe, y que no se podía ni hablar con él porque siempre andaba apurado, y pasaba de un lado a otro muy rápidamente. Por eso, nunca se los veía juntos, salvo cuando se reunían todos los habitantes de Ciudad Gatonesa para tratar de solucionar algún problema. Y últimamente, tenían un grave problema que no sabían cómo resolver…
Por ejemplo al principio del relato se nos informa que estos dos personajes, Rapigato y Gatontuelo son enemigos, pero si no conocemos la palabra enemigo no sabremos qué quiere decir. Pues deberemos fijarnos muy bien ya que el título nos entrega la importante información puesto que dice que Rapigato y Gatontuelo se hicieron amigos, y la palabra amigo es bastante parecida a enemigo, entonces, podríamos pensar que si hicieron amigos es porque antes no lo eran, entonces podemos concluir que enemigo es contrario a ser amigo.
Otros personajes se mencionan más adelante son Gatomisario y sus Gatolicías, dos palabras nuevas que por supuesto no aparecerán en el diccionario, por lo tanto tendremos que deducirlas. ¡Qué divertido desafío!
Si quieres revisar el cuento completo y seguir con el divertido ejercicio te invitamos a visitar El huevo de chocolate