Los gases nobles corresponden a elementos químicos que se caracterizan porque su última capa electrónica está completa. ¿Qué significa esto? Que es un elemento químicamente estable.
Los primeros registros de la existencia de estos gases data de 1784, año en que el químico ingles Henry Cavendish (1731-1810) comenzó a estudiarlos en profundidad.
En 1894, William Ramsay descubrió un gas al que denominó argón. Este es monoatómico, no presenta reacciones químicas y carecía de un lugar en la tabla.
Inmediatamente supuso que debían existir otros gases de propiedades similares y que todos juntos formarían un grupo.
En efecto, poco después se descubrieron los otros gases de este tipo y se les asignó el grupo cero.
Tipos de gases nobles
Los gases nobles son radón, xenón, kriptón, argón, neón y helio.
Otra denominación para los gases nobles es «gases inertes», debido a que no reaccionan con otros elementos químicos.
Los gases nobles se caracterizan por poseer propiedades químicas muy similares entre sí.
¿En qué se usan de los gases nobles?
– Radón: Aunque no se utiliza de forma masiva y comercial, este gas de origen natural. Se utiliza para calibrar equipos de monitoreo del gas radón que se produce dentro de las viviendas. Este radón se encuentra en el ecosistema en rocas y suelos de tipo graníticas y emana de forma sencilla al aire.
– Xenón: El xenón se utiliza en más dispositivos de los que imaginas: está incorporado en aparatos como las lámparas bactericidas, tubos electrónicos, lámparas estroboscópicas y en los flash de fotografía. También se utiliza como anestésico y en la industria nuclear se aplica como agente oxidante.
– Kriptón: Este gas noble tiene un uso médico e industrial. En el área médica se emplea en equipos especializados de imagen por resonancia magnética. Y en el ámbito industrial y cotidiano, es posible verlo por las noches en las luces delanteras de halógeno de los automóviles. Las mezclas de kriptón con argón se utiliza en lámparas fluorescentes.
– Argón: En el día a día, este gas se utiliza con frecuencia en la metalurgia y siderurgia. Se considera un gas de protección inerte. Se utiliza (junto con el kriptón) en luces fluorescentes, en soldadura al arco y fabricación de metales. También es posible utilizarlo en el buceo, para el inflado de trajes secos, ya que impide el contacto del agua con la piel.
– Neón: Su uso más común se encuentra en lámparas eléctricas o ampolletas. Sin embargo, este gas también puede ser utilizado como refrigerante en la industria aeroespacial y aeronáutica, al crear imágenes infrarrojas. También se utiliza en tubos de vacío, la elaboración de pararrayos, tubos de televisión.
– Helio: El helio no solo sirve para inflar globos. Este gas tiene importantes usos en la medicina, para la realización de resonancias magnéticas. También es relevante en la industria aeroespacial, mantención de partes de satélites, motores y refrigerante (y el enfriamiento) de oxígeno líquido e hidrógeno de naves espaciales. En el buceo se utiliza una mezcla de 80% helio y 20% de oxígeno para el nado en profundidad. Y en el retail y supermercados, es posible verlos más cerca de lo crees: se usa en la lectura de códigos de barra (junto con el neón).