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El alpinismo es una actividad deportiva que consiste en escalar montañas y superar grandes desafíos físicos y mentales en terrenos escarpados y accidentados. Es una disciplina exigente que combina la habilidad técnica, el conocimiento de la montaña y la resistencia física.

El alpinismo es una disciplina que se practica hace más de dos siglos. Todo comenzó con la conquista del Mont Blanc, por J. Balmert y M. G. Paccard, en 1786. Tras ello, casi todas las cimas de los Alpes fueron alcanzadas en el siglo XIX: la Jungfrau (1811), el Pelvoux (1828), el monte Rosa (1855), la barra de los Ecrins (1864), el Cervino (1865) y la Meije (1877). 

Los ingleses (Whymper, Tyndali, Mummery, entre otros), ayudados por guías (Almer, Anderegg, Burgener, entre otros), fueron pioneros en el desarrollo de este deporte-aventura.

El Aconcagua, punto culminante de los Andes, el monte Cook, en Nueva Zelanda, y el Kilimanjaro, la cima más alta de África, fueron escalados antes de fin de siglo. Todas estas cimas estaban fuera de Europa.

Alpinista en las alturas. Foto: Pixabay

La conquista del Himalaya generó una alta expectativa, en especial por sus 14 cumbres de más de 8000 metros, las cuales no se conquistaron hasta 1950.

Luego de esa travesía, otros desafíos en altura se alcanzaron: la cima del «techo del mundo», el Everest, se alcanzó en 1953.  

Al no contar con nuevas cumbres por alcanzar, el alpinismo pasó de las escaladas complejas en invierno y en solitario, al uso de material y equipos más ligeros en rutas naturales y libres.

Implementos del Alpinismo

Mosquetón

El mosquetón es un anillo metálico de aleación ligera, de forma ovalada, que lleva un brazo articulado, y que se utiliza para unir a un pitón (clavija), una cuerda o un estribo, en las maniobras de aseguración y en una escalada artificial.

Alpinismo
Mosquetón. Foto: Pixabay

Cuerda en alpinismo

Las antiguas cuerdas de cáñamo o de paja fueron reemplazadas por cuerdas de nylon, más flexibles y ligeras, imputrescibles que absorben mejor la fuerza de choque en caso de caída del alpinista.

Se utilizan las cuerdas de seguridad sencillas (11 mm de diámetro), de una longitud de 40 m, y la cuerda de rappel, utilizada en doble (9 mm de diámetro), de una longitud de 70 a 80 m y bicolor.

Empotrador para alpinismo

Utensilio de acero o de aleación ligera para el aseguramiento en una pared rocosa. El empotrador desempeña una función similar a la del pitón o clavija. Se coloca en una fisura y se bloquea por efecto de la tracción.

Bien colocado, permite un aseguramiento eficaz y, al contrario que el pitón, no deteriora la roca. Los pitones aparecieron en los años cincuenta y existe en la actualidad un gran número de variedades.

Pitón en espiral

Pitón metálico de gran longitud, que se hunde en la nieve o en el hielo y al que se fija un mosquetón. Los pitones tradicionales, que se clavan con un martillo, están siendo sustituidos por tornillos de hielo (pitones en espiral), que permiten una mejor fijación.

Piolet

Utilizado en trayectos de nieve y de hielo, el piolet se compone de un mango que termina en un extremo con un pico, sujeto por un casquillo, y en el otro extremo por una especie de piocha, formada por una boca de martillo y un pico.

La cabeza del piolet casi siempre está perforada por un agujero donde puede engancharse un mosquetón.

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Piolet en la montaña. Foto: Pixabay

Martillos

Las diferencias entre el piolet y el martillo son muy sutiles. Existe, por otra parte, un martillo piolet que permite al mismo tiempo anclar y plantar clavijas.

El martillo de hielo tiene un mango corto (50 cm aproximadamente) y se caracteriza por tener una hoja muy curvada, inclinada hacia abajo.

Guantes

Los guantes de cuero delgado son adecuados para la roca y en el hielo, y los de lana en la nieve.

Las manoplas protegen más del frío que los guantes, pero no facilitan maniobras delicadas cuando se plantean problemas técnicos.

Calzado

A la vez elemento de protección y de avance, es un elemento básico del equipamiento, que ha evolucionado mucho.

Los calzados con suela plástica han sustituido a los clásicos de cuero, y ofrecen las ventajas de impermeabilidad, ligereza y rápido secado, aunque presentan inconvenientes relacionados con la transpiración.

Así, siempre que el terreno lo permita, la zapatilla deportiva, todavía más ligera y flexible, reemplaza a la bota más alta, cuando la escalada no se realiza descalzo

Clavijas o pitones

Sirven como puntos de anclaje para los relevos o los rappels, como puntos de aseguramiento (colocados por el primero de la cordada para asegurar su progresión) y como puntos de apoyo (para la escalada artificial).