Considerada la isla más grande de las Antillas, y que luego se convirtió en la plaza fuerte del Imperio español, la conquista de Cuba resultó menos difícil y mucho menos dramática que en Santo Domingo.
Descubierta por Colón el 27 de octubre de 1492, fue bautizada con el nombre de Juana. Sin embargo, ese nombre nunca se usó, manteniendo siempre el de Cuba con que la designaban sus primitivos moradores.
Colón tomó sólo posesión nominal de la isla, ya que no dejó en ella ningún destacamento y su conquista efectiva data del año 1511.
En esa fecha llegó a Cuba el capitán Diego Velásquez de Cuéllar, originario de Segovia. Acompañado de 300 hombres, Velásquez los eligió entre los mejores españoles que peleaban en Santo Domingo.
Entre ellos estaba Hernán Cortés, más adelante conquistador de México.
El venerado fray Bartolomé de las Casas formaba también parte de esa expedición.
Victoria española y conquista de Cuba
La conquista de Cuba habría sido pacífica si se hubiera emprendido algunos años antes; pero Velásquez desembarcó cerca de punta Maisi, donde había muchos haitianos fugados de la Española (Isla de Santo Domingo), los que alertaron y se unieron a los cubanos, atacando duramente, con flechas, macanas y hondas a la reducida hueste española.
Velásquez logró derrotarlos y como escarmiento hizo quemar vivo al caudillo de la resistencia, un cacique dominicano llamado Hatuey, que ya había dado mucho que hacer en la Española.
Fue un acto de ferocidad, pero el que hay que juzgar de acuerdo a las circunstancias. En esa época se usaba y se abusaba de semejante suplicio; no hacía mucho tiempo que Juana de Arco, en Francia, había sido sacrificada por los ingleses de la misma forma.
Derrotados los indios y ejecutado su jefe, quedó pacificada la parte oriental de Cuba.
Entonces Velásquez fundó la villa de Baracoa. Más tarde pasó a situarse en Bayamo, y los indios se refugiaron en Camagüey. Aunque siempre quedaban indígenas ocultos en las sierras y en los bosques de la isla, la mayoría de sus habitantes se sometió resignados al dominio de los extranjeros.
Velásquez murió en 1523, dejando pacificada la isla y bien comenzada su colonización.