La estepa se puede definir como un bioma típico de las regiones más alejadas del mar. Cuando una pradera de hierbas altas y abundantes se extiende a zonas donde hay menos lluvias, deriva en terrenos cubiertos por hierbas más bajas y más escasas, convirtiéndose en estepa.
La estepa se puede definir como un bioma típico de las regiones más alejadas del mar; a veces se ha dicho que es como un desierto frío, para diferenciarlo del resto de los desiertos más áridos. El factor limitante es el agua, cuyas precipitaciones se aproximan a los 250 mm anuales.
Sus suelos están poco desarrollados, pero son ricos en elementos minerales aunque escasos en materia orgánica.
Estepa en la fauna
Entre los animales propios de la estepa están el coyote y el bisonte, en América del Norte; el avestruz en América del Sur; los caballos salvajes y los antílopes en Europa y Asia; el jerbo y el órix en Africa; y el canguro en Australia, además de una amplia variedad de reptiles, insectos y roedores, como el ratón topo, que vive bajo tierra.
Animales como el coyote se adaptan perfectamente a vivir en las estepas, donde recorren largas distancias en busca de agua y alimentos.
En general, son especies capaces de soportar los veranos calurosos y los inviernos fríos y secos, que a su vez impiden el desarrollo normal de los vegetales. Esto obliga a los animales a emigrar en busca de pozos de agua fangosa.
Al igual que en los desiertos, las plantas herbáceas y el resto de la vegetación crecen en los períodos posteriores a las precipitaciones. Luego de las lluvias, viene un período de sequía latente durante varios meses. La estepa se distribuye en gran parte de nuestro planeta y la podemos encontrar en las zonas esteparias de la antigua Unión Soviética, las praderas y llanuras de EE.UU., las pampas sudamericanas y en parte de Sudáfrica.
La intervención humana
Las estepas fueron pobladas hace muchos años por grandes herbívoros. Sin embargo, comenzó a ser utilizada por el hombre para el pastoreo o para el cultivo de cereales en zonas donde la lluvia hacía posible el desarrollo de estos productos.
La sobreexplotación de las estepas actualmente ha traído como consecuencia la degradación irreversible de estos ecosistemas, transformándolos poco a poco en inmensos desiertos.
Hierbas y arbustos
La vegetación de la estepa es del tipo xerófilo; es decir, se caracteriza por su buena adaptación a los lugares con escasez de agua. Aunque los tallos se sequen, las plantas mantienen su humedad y vida debajo de la tierra.
La vegetación predominante es la herbácea, siendo bastante comunes las gramíneas, los arbustos espinosos, las hierbas y matas aromáticas.
Existen ciertos vegetales que tienen raíces que crecen en forma de tubérculos, donde se van acumulando reservas de líquido y sustancias nutritivas que se utilizan cuando vuelven a brotar.
En Chile las estepas magallánicas se caracterizan por la presencia de coirones, mata barrosa, mata verde, además de ejemplares aislados de especies arbóreas, como la lenga.
