Para realizar este experimento necesitas los siguientes elementos:
– Un poco de plasticina.
– Un mondadientes
– Un reloj con segundero o un cronómetro.
Primero
Con un trozo de plasticina forma una bolita. Luego aplástala hasta que tenga alrededor de medio centímetro de espesor.
Segundo
Con tus dedos índice y mayor busca el latido de la sangre en la zona de la muñeca. No lo hagas con el dedo pulgar, porque este posee su propio latido.
Tercero
Coloca la plasticina en el lugar exacto donde sientes el latido. Luego clávale suavemente el mondadientes y observa cómo se mueve. Cuenta cuántas veces lo hace en un minuto. Después trota un poco alrededor de la mesa y ponte el pulsómetro nuevamente para medir tus latidos. ¿Qué conclusiones sacas?
Observación
En los niños pequeños, el corazón late normalmente mucho más rápido. Su pulso puede alcanzar entre 90 y 120 pulsaciones por minuto.