Debemos comenzar recordando que la Guerra del Pacífico se dio en cinco fases, comenzando con la campaña marítima que se inició con el Combate de Chipana, en abril de 1879, al que le siguieron el Combate Naval de Iquique, Combate de Punta Gruesa, Combate nocturno de Iquique y en octubre del mismo año el Combate Naval de Angamos. En esta última acción fue capturado el Huáscar con sus máquinas intactas, donde falleció en combate su Comandante, Miguel Grau Seminario.
Esto fue un gran triunfo para Chile, porque el Huáscar había sido considerado por el Gobierno de Aníbal Pinto Garmendia, el primer objetivo a destruir de la Escuadra peruana, para poder seguir las maniobras militares. Una vez en poder chileno la mayor embarcación enemiga, se continuó con las campañas por tierra, las que fueron apoyadas por las embarcaciones chilenas.
Luego vino la campaña de Tarapacá, la que finalizó con el triunfo chileno en noviembre de 1879, que permitió adueñarse de la Región, pero debió lamentarse la muerte de muchos compatriotas, entre ellos Eleuterio Ramírez Molina, conocido póstumamente como el «León de Tarapacá». A esta fase de la guerra le siguió la campaña de Tacna.
En este contexto, las instrucciones recibidas por la Escuadra Nacional para bloquear El Callao fueron claras: debía destruir y bombardear cualquier embarcación peruana apostada en el lugar, haciendo entrar las lanchas torpederas al puerto para evitar la huida de las embarcaciones enemigas.
En esos momentos la Escuadra Nacional estaba compuesta por los buques Blanco Encalada, Pilcomayo, Huáscar, Angamos, Matías Cousiño, y las torpederas Janaqueo y Guacolda.
Entonces, el Huáscar entró a El Callao escoltando a las lanchas torpederas chilenas, con la misión de destruir a los buques peruanos Atahualpa y La Unión que se encontraban en el lugar. El Huáscar y la Guacolda calcularon mal el tiempo de reunión, dejando sola a la Janaqueo.
El Capitán Luis Alberto Goñi Simpson, comandante de la Janaqueo, en vez de esperar a sus compañeros, se lanzó solo a cumplir el plan, pasando entre buques neutrales hasta llegar frente a la Unión. Goñi, convencido de que cumpliría con su misión, dio la orden de lanzar el primer torpedo contra el buque enemigo. Pero el Comandante peruano rodeó su embarcación con una red que hizo chocar el torpedo sin causar ningún daño a su embarcación, previniendo así, cualquier ataque inesperado.
Posteriormente, el 22 de abril, se efectuó el primer bombardeo sobre El Callao, realizado por el Huáscar, Pilcomayo y Angamos, quienes se ensañaron con la Dársela y los fuertes, pero por la distancia, causaron muy poco daño. Los ataques fueron repetidos en numerosas ocasiones, sin lograr algo realmente importante para la Escuadra chilena. Así, el bloqueo al puerto de El Callao, se prolongó alrededor de 9 meses.