Tradiciones culturales
Entre éstas las más importantes son:
– Ceremonia del Hombre Pájaro: durante casi 200 años, representantes de distintos linajes competían en O’rongo por conseguir el primer huevo de la gaviota, que estaba en el islote Motu Nui. Quien lograba tomar el preciado huevo y llevarlo intacto al otro extremo era nombrado Tangata Manu (Hombre Pájaro). Durante un año, el Tangata Manu y toda su tribu tenían privilegios económicos, políticos y religiosos.
– Aringa ora o Koro: se realiza con motivo del solsticio de invierno y significa el rostro vivo del patriarca. En esta ceremonia, se festeja el ciclo anual de la vida, relacionado con la fertilidad y productividad. También simboliza una nueva temporada de siembra tanto de los recursos terrestres como marinos. Además, se rinde homenaje a los patriarcas de las familias, junto a parientes de la comunidad. La celebración consiste en hacer un gran curanto pascuense o Umu Ta’o, compuesto de pollo, pescado, langosta, plátanos y camotes.
– Tapati: es quizás en la actualidad la fiesta más importante como muestra cultural de Rapa Nui, porque se mantienen las costumbres ancestrales a través de canciones, bailes y otras antiguas tradiciones. Se realiza por dos semanas en febrero y participan todas las familias agrupadas en clanes con sus respectivas candidatas a reina. Cada grupo de familias debe realizar una serie de pruebas para sumar puntos a su candidata, que es coronada la primera luna llena del mes. Entre la gran cantidad de pruebas que se realizan está el Riu (relatos de historias épicas y leyendas), el Haka Pei (jóvenes descienden sobre troncos de plátanos a gran velocidad por una colina) y la Takona (competencia de pintura corporal), entre otras.
– Ciclo de la vida: por ejemplo, a los ocho años se realizaba el tatuaje de las piernas. En la pubertad,se hacían importantes ceremonias de iniciación a la vida adulta. Los adolescentes, que se alejaban de sus familias por meses, eran llevados a la isla Motu Nui, donde les pintaban el cuerpo de rojo y blanco. En ese lugar, aprendían oficios, técnicas de guerra, conocimientos religiosos y juegos, entre otras cosas. Cuando un pariente importante de la familia moría, cubrían su cuerpo con una tela vegetal y se mantenía al aire libre junto a un ahu (altar ceremonial), por dos años. Luego, se sacaban los huesos y se dejaban en una cámara construida en el altar ceremonial. Sus familiares recordaban al difunto con una ceremonia llamada Paina, que se realizaba frente al ahu. En ella se instalaba una gran figura, que estaba hecha de palos y telas vegetales, y provista de una cabeza.
El origen de los moais
Se cuenta que la tribu Hanau Momoko hizo las primeras figuras, que no resultaron de lo mejor; por ello, el maestro Miru mandó a seis compañeros a la casa de Kave Heke para aprender cómo se trabajaba el moai. Él les dijo que “abajo en vosotros está el moai”. A su regreso, le contaron a Miru lo que les había dicho y este los mandó a tallar un moai masculino y uno femenino. Como el resultado fue bueno, hicieron así todos los moais, los que eran instalados encima de los ahu (estructuras ceremoniales) de los muertos para que vigilaran los mausoleos.
La caverna de las vírgenes
También llamada Ana o Keke, es una caverna ubicada al este de la isla. La leyenda cuenta que muchos pascuenses encerraban en este lugar a sus amadas para alejarlas del sol, con el fin de blanquear sus pieles y con la esperanza de que tuvieran criaturas blancas. Esta costumbre terminó en una tragedia, pues los hombres, luchando contra unos piratas, olvidaron llevar alimentos a sus mujeres y ellas murieron de hambre. Desde ese momento, surgieron poemas y canciones recordando la triste historia.
Ahu Vinapu
Es un centro ceremonial ubicado a 5 km de Hanga Roa. En él se realizaban cultos a los antepasados de cada grupo familiar de los habitantes de la isla. Está constituido por una plataforma elevada que tiene uno o más moais. Además, tiene tres ahu, de los cuales perduran dos. El primero se llama Vinapu I y se distingue por su pared de piedras. El segundo, denominado Vinapu II, tenía funciones astronómicas, y del tercero (Vinapu III) solo quedan algunas piedras.