Sacerdote católico, Obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santiago de Chile y primer rector de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Biografías
Diego de Almagro
En Perú, Almagro supo que existían territorios ubicados más al sur que el incaico, que eran aún más ricos. Así fue como el 3 de julio de 1535 partió, junto a la expedición más poderosa jamás vista hasta entonces en América, hacia lo que se conocería más tarde con el nombre de Chile.
Bernardo de Vera y Pintado
Abogado en impulsor de la Independencia de Chile en 1810. Fue un activo impulsor de la revolución de la Independencia desde 1810, y asumió como representante de la Junta de Buenos Aires ante el gobierno revolucionario de Santiago. Tras la derrota de Rancagua, se exilió en Mendoza y retornó en 1817, asumiendo importantes cargos. Murió en Santiago en 1827.
Le Paige, Gustavo
Hasta hoy su paso por Atacama se recuerda estrechamente ligado a la concreción de obras de desarrollo vitales para la II región, como caminos, hospitales, canchas deportivas, hosterías, asesorías técnicas estatales, sistemas de captación de aguas y tantas otras realizaciones que llevan su sello.
Edwards Mac-Clure, Agustín
Diplomático, político, empresario periodístico y economista. Fundó El Mercurio de Santiago, el 1 de junio de 1900. En 1904 lanzó Las Ultimas Noticias, y luego vendrían El Mercurio de Antofagasta y sucesivamente las revistas Zig-Zag, Selecta, Familia, Corre Vuela y El Peneca, en 1908. En 1921 fundó La Estrella de Valparaíso.
Ibáñez Gutiérrez, Adolfo
Abogado, juez, diplomático y ministro chileno. Su carácter le hizo merecedor de una gran reputación en la opinión pública, por ser un hombre de recta moral, inteligente y honesto. En 1870 comenzó su vida de diplomático, tratando de solucionar el conflicto con Perú, por la liquidación de las cuentas de la Escuadra aliada que en 1866 combatió en la guerra contra España.
Urmeneta García, José Tomás
Empresario chileno.En 1853 inició una diversificación de sus inversiones, levantando lo que se calificaría como un «imperio» con las utilidades de las minas de Tamaya. Hasta 1860 se había expandido a la minería de la plata, del cobre en Tamaya, del oro y del carbón. Asimismo, había establecido sus propias empresas: la Sociedad Chilena de Fundiciones y la Sociedad de Gas de Santiago. Además, invirtió -entre otras- en sociedades anónimas como Ferrocarril del Sur; la Compañía Chilena de Seguros; y el Banco Nacional de Chile.